La práctica de deportes se conceptúa, de forma casi automática, como una vivencia lúdica, divertida y relajada. Sin embargo, como actividad humana, no está exenta de experiencias indeseables, más cuando de trata de deportes de riesgo. Es éste el caso de los deportes de montaña: alpinismo, barranquismo, rafting, puenting, etc.
Cada año un número considerable de aficionados y profesionales de estas disciplinas, además de sus familiares, amigos y rescatadores se enfrentan a vivencias estresantes, incluso traumáticas donde, en éstas, la culpa y sobre todo la culpa por haber sobrevivido es uno de los sentimientos característicos.
Estas situaciones, culminadas con las circunstancias y características del rescate del alpinista español Óscar Pérez accidentado recientemente en el Latok II en Pakistán, ha puesto sobre la mesa cuestiones y experiencias a debatir en torno a los recursos humanos y materiales, protocolos, riesgos, costes, etc. en la gestión de estas emergencias, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras.
Bienvenido sea el debate, desde el sosiego, el conocimiento y la experiencia multidisciplinar en la búsqueda de soluciones que alcancen, no sólo a la atención inmediata, sino también a la prevención, la educación y la coordinación; así como a la continuidad de atención integral a los afectados en la fase poscrítica de los accidentes de montaña.
Puede consultar la noticia comentada en la edición electrónica del diario El País. O bien descargar una versión en PDF del artículo en el enlace que figura a continuación.
Artículo publicado en el diario El País el 23 de agosto de 2009 (PDF 2,9 MB)
- Trabajo social en el volcán de la isla de La Palma - 29 diciembre, 2021
- Servicio de urgencias sociales en la comarca de Los Monegros (Huesca) - 28 diciembre, 2021
- Atenciónpsicosocial. Una guía para el trabajo en contextos de crisis - 21 diciembre, 2021