A medida que día a día se hacen más reales las amenazas a nuestra seguridad y salud (terrorismo, terremotos, inundaciones, epidemias, etc.), el miedo y la sensación de desprotección, personal y colectiva, están cada vez más instauradas en nuestro medio; y no diferencian edades, países, sexo, color de la piel, idioma… ni bolsillo. De ahí que los más poderosos han optado por invertir en la reducción de sus propias vulnerabilidades.
El Magazine del diario La Vanguardia (10-7-2016) informa que la localidad germana de Rothenstein es uno de los lugares donde ya es realidad un refugio de más de 21.000 metros cuadrados que alberga unos 34 apartamentos de lujo, piscina comunitaria, cine, hospital, banco de semillas, etc. Y, parece, que los Pirineos son de interés para alguna empresa del sector.
La ficción hecha realidad.
Lo que todavía debe ser ficción es que, ante la materialización de una determinada amenaza, llegan a tiempo al destino…
Más información en: http://www.magazinedigital.com/historias/reportajes/salvese-quien-pueda
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